Se cumplen justo nueve años de aquella Festa de la Rosa en la que Miquel Iceta levantó el fervor entre la militancia del PSC desgañitándose al grito de: "¡ Pedro, mantente firme, líbranos de Rajoy y del PP, por Dios , aguanta!". Salvador Illa no es Iceta. El momento político es otro -ahora los socialistas mandan en la Moncloa y en la Generalitat- y el president es devoto de la sobriedad y poco amigo de subir decibelios. Pero lo que no ha cambiado es ese cierre de filas con Sánchez para arroparle y pedirle, una vez más, que resista, ahora ante Alberto Núñez Feijóo y Vox.
Este domingo, la Pineda de Gavà volverá a ser una bombonera del socialismo catalán, un hervidero de un clima de adhesión al presidente del Gobierno que poco tiene que ver con el que el líder del PSOE lidia