Isla de Lobos remite en Canarias a Fuerteventura : aguas turquesa y senderos volcánicos.
Pero al otro lado del Atlántico hay otra Isla de Lobos, abrupta y rebosante de fauna marina .
Las separan unos 8.300 km en línea recta y las unen tres claves: el Atlántico, un faro y un nombre heredado de los antiguos “lobos” que las habitaron.
Dos maneras de ser atlántico
En Fuerteventura , el Islote de Lobos es un pequeño paraíso volcánico. Llegas en barca desde Corralejo , pasas el muelle y se abre una postal: La Concha , una playa en forma de media luna, de arena clara y aguas quietas, El Puertito , con sus charcos turquesa de marea, y, si subes, el cono de La Caldera marcando el horizonte.
El faro de Punta Martiño , de 1865, completa la estampa. Es un espacio protegido