Los bancos de Wall Street y las compañías tecnológicas grandes y pequeñas se apresuraban el sábado a calcular cómo se verían afectados sus decenas de miles de empleados por la proclamación del Presidente Donald Trump que impone una tarifa de 100 mil dólares para las visas otorgadas a trabajadores extranjeros calificados.
El cambio desató una confusión inmediata sobre las normas exactas y su aplicación. Poco después de que Trump firmara la proclamación el viernes, los empleados de Microsoft, Amazon y JPMorgan recibieron avisos que aconsejaban a quienes tenían visas H-1B y se encontraban fuera de Estados Unidos que regresaran antes de que las nuevas normas entraran en vigor a las 00:01 horas (hora del este) del domingo.
La Administración Trump intentó aclarar la confusión el sábado al afir