El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha inaugurado este lunes el Memorial del Camp de la Bota en Sant Adrià del Besòs (Barcelona), en recuerdo a los 1.700 fusilados en este espacio al inicio del franquismo. El líder del Ejecutivo catalán ha vinculado este lugar con lo que sucede actualmente en otros puntos del planeta. "Hoy aquí no escuchamos disparos ni bombas, pero no podemos ser ni sordos ni ciegos a los disparos y bombardeos que sí ocurren en otros lugares del mundo", ha afirmado, en referencia a los bombardeos y "el horror" que sufren los civiles en Gaza y Ucrania.

"Lo que está en juego va mucho más allá de las fronteras o de un conflicto concreto. Durante la Guerra Civil y la posguerra, aquí se jugó el futuro de las democracias en Europa. Desde aquí hubiéramos necesitado

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