Treinta años de falta de atención a la red de alcantarillado en Aguascalientes han comenzado a cobrar factura. El subsuelo, debilitado por décadas sin renovación, colapsa con la humedad que dejan las lluvias y el peso de los vehículos, lo que provoca la aparición de socavones convertidos en un riesgo constante para la población.
En lo que va de la temporada, la Coordinación Estatal de Protección Civil ha registrado cinco hundimientos: cuatro en la capital y uno en la carretera entre La Congoja y San José de Gracia.
Este último caso ha sido el más crítico, pues el reblandecimiento del terreno abrió un socavón que afectó la mitad de una vialidad de dos carriles. La zona se mantiene señalizada para evitar accidentes, mientras la Secretaría de Obras Públicas del Estado elabora el proyecto de