una reunión de alto nivel para conmemorar el 30 aniversario de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer. Esta conferencia, conocida como Beijing+30, es considerada uno de los puntos de inflexión más importantes en el avance hacia la igualdad de género.
Celebrada en 1995 en China, y con una asistencia sin precedentes de 17.000 participantes, la Conferencia derivó en la adopción la Declaración y la Plataforma de Acción de Beijing, un plan con medidas entorno a ejes clave como la pobreza, la educación, la violencia, las mujeres en los conflictos armados o el ejercicio del poder.
Gobiernos de 189 países declararon, de forma unánime, que la igualdad entre mujeres y hombres era una cuestión de derechos humanos y constituía una condición para el logro de la justicia social, además de ser un