Además de las amenazas contra Venezuela, y en un alarde de prepotencia sin igual, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cargó también en la Asamblea General de la ONU contra sus aliados de la Unión Europea, cuestionó los estudios sobre el cambio climático, descalificó a la propia ONU y cambió de postura contra Rusia.

Estos son los puntos polémicos del discurso de Trump, que llamarían a la risa si no fuesen tan graves:

Reclamó al mundo que se le debería dar el Premio Nobel de la Paz por haber puesto fin, según él, a siete conflictos bélicos en el mundo, aunque esté a punto de iniciar otros.

Reconoció su participación en el asesinato del alto mando de las Fuerzas de Defensa de Irán, durante la agresión israelí a la que Washington apoyó.

Arremetió contra los migrantes en el mundo

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