La historia, que comenzó como un simple viaje a la tienda, ahora mantiene en vilo a toda la familia .
Según relató la propia Robinson en un emotivo mensaje, "Iba a la tienda, literal, a cuadra y media, y no volvió" . El joven, de profesión contador público, trabajaba junto a su padre en un pequeño hotel cuando decidió salir a comprar cigarros. Ese breve trayecto se convirtió en el último momento en que alguien lo vio con vida.
Los detalles que rodean el caso son tan preocupantes como misteriosos:
José Ramón dejó su teléfono celular y lentes en el lugar de trabajo
Las autoridades admiten que la falta de dispositivos electrónicos ha dificultado el rastreo
La madre del joven, Mónica Ponzanelli, denuncia falta de acción por parte de las autoridades
La frustración de la familia e