La televisión argentina supo, una vez más, emocionar y acercar realidades distintas en una noche plena de historias y solidaridad. El miércoles por la noche, el estudio de Buenas noches Familia , el programa de Guido Kaczka por El Trece, se transformó en escenario de una experiencia conmovedora, donde la vida, la distancia y el deseo de reencuentro se entrelazaron en la voz y el testimonio de un joven venezolano. En esta oportunidad, el protagonista fue un padre inmigrante que, tras perder a sus padres y dejar atrás a su hija en Venezuela, busca la posibilidad de un nuevo abrazo familiar.

Desde el comienzo, Kaczka captó la atención de la platea presentando la historia de este joven, el menor de quince hermanos, que debió atravesar duelos tempranos y desafíos que forjaron su c

See Full Page