En julio de 2025, los salarios registrados en Argentina experimentaron un aumento del 2,2%, superando la inflación de ese mes, que se situó en 1,9%. Esta información fue proporcionada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Este crecimiento salarial representa un alivio en un contexto económico marcado por la tensión entre precios e ingresos.
Desglosando los datos por sector, el sector privado registrado también creció un 2,2%, mientras que el sector público tuvo un incremento del 2,3%. Sin embargo, el sector privado no registrado mostró el mayor crecimiento, alcanzando un 3,6%. A pesar de su inestabilidad y menor cobertura, este segmento impulsó el índice general hacia arriba.
En lo que va del año, los salarios han acumulado un aumento del 23,7% en comparación con diciembre del año anterior. Dentro de este total, los salarios del sector privado registrado aumentaron un 16,2%, los del sector público un 19,1%, y los del sector no registrado sorprendieron con un incremento del 57,9%. Esta última cifra refleja un ajuste significativo, aunque parte de niveles más bajos.
La variación interanual es aún más notable: en los últimos 12 meses, el índice de salarios ha aumentado un 53,2%. En este período, los salarios registrados crecieron un 40,3%, los públicos un 41,3%, y los informales un impresionante 139,7%. Estas cifras evidencian una disparidad considerable entre los sectores, donde los trabajadores informales experimentan los mayores aumentos porcentuales, aunque enfrentan salarios más bajos y una situación de vulnerabilidad.
Dentro del sector público, también se observan diferencias. El subsector nacional creció solo un 0,6% en julio y un 24,5% interanual, mientras que el subsector provincial mostró una expansión del 2,6% en el mes y un 47,3% en comparación con julio de 2024. Estas divergencias indican que los acuerdos salariales dependen en gran medida de cada jurisdicción.
A pesar de estos avances, el poder adquisitivo sigue siendo un tema crítico. Con una inflación acumulada del 17,3% en lo que va del año, los ingresos apenas logran igualar o superar levemente el costo de vida. Según encuestas, más del 80% de los trabajadores considera que su salario es insuficiente para cubrir los gastos básicos. Además, la brecha salarial de género se mantiene en torno al 27%, profundizándose en sectores como la salud y la industria.