El 25 de septiembre, el programa 'Habla Chino' se convirtió en el escenario de una inesperada propuesta de matrimonio que dejó a todos los presentes sorprendidos. Paul Michael, actual pareja de la influencer Pamela López, le entregó un anillo de compromiso en vivo, un gesto que emocionó a la influencer hasta las lágrimas. "Espérate, que quiero llorar", expresó López entre risas, disfrutando del momento romántico.

Sin embargo, la atmósfera festiva cambió drásticamente cuando Joel Ezeta, productor del programa, interrumpió con un comentario sarcástico. Recordó que Pamela aún no ha concretado su divorcio con el futbolista Christian Cueva, lo que generó risas en el set, pero también incomodidad. "Pero escúchame Paul, tiene que ser algo romántico, algo que te salga del corazón, pero hay un problema: no te puedes casar, porque todavía no se ha divorciado", señaló Ezeta, provocando un cambio de ánimo en el ambiente.

Ante esta situación, Paul Michael decidió retirarse brevemente del set, mientras que Pamela López mostró su descontento. "Tumba la fiesta. Envidioso", respondió la influencer, evidenciando su molestia por la forma en que se abordó su situación legal.

La propuesta de matrimonio no solo destacó el deseo de Pamela de formalizar su relación con Paul, sino que también puso de manifiesto los obstáculos legales que enfrenta. En una entrevista con Aldo Miyashiro, la influencer admitió que le gustaría casarse, pero reconoció que su situación con Cueva lo impide. "Bueno, la pregunta es si me gustaría... sí, sí, me gustaría, lastimosamente...", comentó.

Pamela López, quien se separó de Christian Cueva hace aproximadamente un año, ha expresado su deseo de rehacer su vida sentimental. Sin embargo, el proceso de divorcio sigue siendo un obstáculo. López ha manifestado que Cueva no ha mostrado disposición para firmar el divorcio, a pesar de que la separación se produjo hace un año. "Bueno, parece que no. No se quiere divorciar de mí", declaró en una entrevista anterior.

La influencer también ha señalado que los temas legales se centran en la manutención y el régimen de visitas de sus hijos, y que el divorcio aún no ha sido abordado formalmente. En el plano emocional, Pamela ha reconocido que no ha logrado perdonar a Cueva por las infidelidades que marcaron el final de su matrimonio. "No le he perdonado todavía. Yo creo que van a pasar muchos años para que pueda llegar a ese perdón", afirmó.

A pesar de los desafíos, Pamela López busca mantener la calma por el bienestar de sus tres hijos y no se arrepiente de haber hecho públicos los problemas con Cueva, ya que considera que fue una forma de liberarse de los rumores y la presión mediática.