Hartford, Connecticut. — A partir del 1 de octubre entrarán en vigor en Connecticut una serie de nuevas leyes que impactarán directamente en conductores, motociclistas y ciclistas, con el objetivo de modernizar normativas vigentes desde hace décadas y mejorar la seguridad vial.
Una de las reformas más destacadas es la actualización de las leyes de remolque, con más de un siglo de antigüedad. Las modificaciones buscan dificultar el remolque de vehículos desde propiedades privadas y facilitar a los conductores la recuperación de sus automóviles en caso de ser remolcados.
En materia de seguridad, se eleva de 18 a 21 años la edad mínima obligatoria para que los conductores y pasajeros de motocicletas utilicen casco. La norma establece además una multa mínima de 90 dólares por infracciones.