Una mujer compró en un comercio una notebook marca EXO Smart T56 Plus para que su hijo pudiera terminar la tesis de grado. Lo que llegó a su casa, sin embargo, fue una sucesión de problemas.
Primero, el equipo tenía una goma faltante en la base. Luego, apareció un “pitido” proveniente de la pantalla que fue empeorando con el uso. Cuando lo mandó a reparación, el servicio técnico lo “arregló” en un minuto, pero lo devolvió con rayones y el mismo defecto.
La compradora realizó reclamos ante el comercio y el fabricante, pero no obtuvo una solución. Tras diversas instancias de reparación, un reemplazo parcial y una denuncia ante Defensa del Consumidor, presentó una demanda de menor cuantía en el Juzgado de Paz de Viedma.
Durante el proceso, se acreditó que EXO intentó reparar el equipo sin