
Google nació en 1998. Desde entonces, su buscador ha sido uno de los motores de la revolución digital que ha transformado el mundo. Su esencia, no obstante, se había mantenido estable: una lista de enlaces seleccionados de entre miles de millones de webs para ayudar al usuario a satisfacer una necesidad de información, expresada en términos de búsqueda. Ahora, en los albores de la era de la inteligencia artificial, Google va a transformar el modelo. Su buscador dejará de ser una ventana a Internet y en su lugar ofrecerá una versión sintetizada de la red, dejando a decisión del usuario si quiere explorar más allá o le basta con el resumen generado por sus algoritmos.
La herramienta recibe el nombre de 'Modo IA' y aparecerá como un nuevo botón en la parte superior de la página y las apps de Google, junto a las pestañas de “Imágenes” o “Noticias”. Cuando el usuario lo active, la inteligencia artificial de la multinacional, denominada Gemini, consultará la información disponible en la web y generará una respuesta con aquella que considere más relevante, incluyendo texto, imágenes o comparaciones. Los enlaces, que hasta ahora eran la base de la búsqueda tradicional, aparecerán en un apéndice a un lado de la respuesta.
Es la presión que ChatGPT ha traído a toda la industria digital. En la práctica, el nuevo tipo de búsqueda se parece más a una consulta conversacional con una inteligencia artificial como el propio ChatGPT o Perplexity que al Google que dio forma a Internet.
Después de varios meses de pruebas en EEUU y Canadá, el Modo IA estará disponible en España y otros 40 países a partir de este miércoles. La implementación completa a todos los usuarios durará aproximadamente una semana. Por el momento, el modo de búsqueda básica tradicional seguirá siendo el predefinido cuando el usuario abra la página o las webs de Google, aunque el Modo IA se colocará el primero entre las pestañas y Sundar Pichai, máximo ejecutivo de la multinacional, ha expresado que es “el futuro de las búsquedas”.
Más tiempo en Google
El Modo IA es una evolución de la herramienta “Vista creada con IA” que aparece desde el año pasado en algunos tipos de búsqueda, especialmente aquellas que Google llama “exploratorias”. “Desde el lanzamiento de Vista creada con IA, hemos visto un cambio enorme en la manera en que las personas usan Google. Ahora hacen preguntas más largas, más difíciles, más complejas y con matices”, ha avanzado Hema Budaraju, vicepresidenta de Google Search, en una presentación con periodistas europeos en la que ha estado presente elDiario.es.
“Ampliando lo que la Vista creada con IA puede hacer gracias a las capacidades más avanzadas de Gemini 2.5, ahora es posible formular preguntas más matizadas que antes habrían requerido varias búsquedas. Puedes preguntar cualquier cosa y obtener una respuesta útil generada por IA, con la posibilidad de profundizar o hacer preguntas de seguimiento”, ha explicado la directiva de Google.
Puedes preguntar cualquier cosa y obtener una respuesta útil generada por IA, con la posibilidad de profundizar o hacer preguntas de seguimiento
Hema Budaraju — vicepresidenta de Google Search
Esa posibilidad de continuar el hilo de una misma búsqueda con nuevas preguntas relacionadas es una de las claves del Modo IA. Ahora, al final del comentario de Gemini, Google incluirá un espacio para poder seguir interactuando con la IA en vez de navegar o clicar en los enlaces. Budaraju asegura que este modelo hace que las búsquedas sean el doble o incluso el triple de largas que antes.
“Algo interesante es que los primeros usuarios que han probado Modo IA están escribiendo consultas mucho más largas, casi de dos a tres veces la longitud de las búsquedas tradicionales. En esencia, el Modo IA amplía los tipos de preguntas con las que Google puede ayudarte. Reduce la barrera para acceder a ese núcleo de información que estás buscando”, ha asegurado. El nuevo modo también integra la búsqueda por imágenes, con la posibilidad de sacar una fotografía y hacer una pregunta al respecto.
El sistema utiliza una técnica de “descomposición de consultas” que desglosa la pregunta en varios subtemas y lanza una ráfaga de búsquedas simultáneas para cada uno de ellos. El resultado es que el Modo IA “puede profundizar aún más en los entresijos de la web”, defiende Google. No obstante, su llegada inquieta a miles de empresas que viven gracias a su buscador tradicional.
El dilema del tráfico
El cambio de Google genera incertidumbre sobre gran parte de la economía del clic, afectando a empresas de múltiples sectores cuya supervivencia depende de la visibilidad que hasta ahora obtenían a través del buscador. El tiempo que el Modo IA ha estado activo en Estados Unidos y otros territorios de habla inglesa ha permitido realizar los primeros análisis preliminares sobre cómo impacta en el tráfico redirigido al resto de la web. Los resultados apuntan a caídas significativas: por ejemplo, un estudio de la agencia de marketing digital iPullRank, especializada en SEO técnico y aplicaciones de IA generativa, concluyó que apenas el 4,5 % de las sesiones del Modo IA terminan en clics para sitios web.
Se trata de una tendencia que confirma los hallazgos más sólidos de los estudios sobre el impacto de la Vista creada con IA . Según un informe de Pew Research, un centro independiente estadounidense que realiza estudios y encuestas sobre tendencias sociales, políticas y tecnológicas a nivel global, este modo reduce a la mitad los clics que los usuarios hacen en los enlaces que Google proporciona. Otros análisis, como los de la plataforma de marketing y SEO Ahrefs, indican que la Vista creada con IA ha provocado una caída del 35 % del tráfico.
Este impacto no solo lo reciben las páginas con información o los medios de comunicación, de los que la IA puede extraer información y resumirla. También lo está sintiendo el comercio electrónico. “Aquellas tiendas que tienen blogs o han invertido mucho en crear contenido informativo de la parte ancha del funnel [la fase inicial en la que los usuarios buscan información general antes de decidir si comprar] se están viendo afectadas”, apunta María José Cachón, consultora SEO y directora de la agencia Laika.
No estamos observando los descensos drásticos que afirman algunas fuentes de datos externas, las cuales presentan limitaciones
Google
Google rechaza de plano esta tesis. “Existen varios informes y estimaciones diferentes, hemos visto mucha especulación y afirmaciones inexactas sobre el tráfico proveniente de la búsqueda”, dice Hema Budaraju. “No estamos observando los descensos drásticos que afirman algunas fuentes de datos externas, las cuales presentan limitaciones en sus metodologías”, recalca, avisando que hay “muchos motivos” por los que las webs pueden experimentar caídas del tráfico proveniente de Google.
La tesis de la multinacional es que, más allá del tráfico, los clics que llegan desde sus búsquedas asistidas con IA “son de mejor calidad”. Es decir, el usuario es más consciente de la web que está visitando y está más alineado con su propósito, ya sea consultar una información en profundidad o terminar una compra.
“Google, más que cualquier otra entidad en la industria, está comprometida a enviar tráfico a la web”, defiende su vicepresidenta encargada del departamento de búsquedas. “Hemos observado que, cuando los usuarios interactúan con este contenido, tienden a pasar más tiempo de calidad en los sitios, lo cual se refleja en que no rebotan, no regresan inmediatamente a la búsqueda. En general, el tráfico desde la búsqueda hacia la web se ha mantenido relativamente estable”, asegura Budaraju.