**Gaza: La devastación tras dos años de guerra**

JERUSALÉN — La guerra entre Israel y Hamás ha dejado una huella devastadora en la Franja de Gaza, afectando a 2,1 millones de palestinos. Desde el inicio del conflicto, el 7 de octubre de 2023, cuando Hamás lanzó un ataque sorpresa, las cifras reflejan una crisis humanitaria sin precedentes. De cada diez personas, una ha perdido la vida o ha sido herida en un ataque israelí, y nueve están desplazadas. La situación es crítica: al menos tres personas no han comido durante días y cuatro de cada cien niños han perdido a uno o ambos padres.

La destrucción es alarmante. De cada diez edificios en Gaza antes de la guerra, ocho están dañados o destruidos. Además, el 80% de las tierras de cultivo han sido arrasadas. Los cementerios están desbordados y se han reportado numerosas fosas comunes. Más de 2.000 personas que buscaban comida han perdido la vida, según el Ministerio de Salud de Gaza. Los ataques aéreos han matado a familias enteras en sus hogares, y los hospitales están abrumados por la cantidad de heridos.

Israel justifica sus ataques, alegando que Hamás utiliza hospitales como centros de mando. Sin embargo, la comunidad internacional ha expresado su preocupación por el alto número de civiles muertos, que Israel atribuye a la presencia de militantes en áreas residenciales. Hasta la fecha, más de 67.000 palestinos han muerto y casi 170.000 han resultado heridos, con más de 40.000 de estos últimos sufriendo lesiones irreversibles.

La población de Gaza se encuentra en un estado de desplazamiento constante. Muchas familias han sido forzadas a mudarse repetidamente para escapar de los bombardeos. Las condiciones de vida son precarias, con campamentos de tiendas improvisadas extendiéndose por el sur de Gaza. La guerra ha separado a numerosas familias y ha dejado a miles desaparecidos.

El ejército israelí controla la mayor parte de Gaza, lo que ha transformado el territorio. Se han demolido barrios enteros y se han construido nuevos puestos militares. La devastación es tal que el bombardeo ha generado escombros equivalentes a 12 veces el tamaño de la Gran Pirámide de Giza. Según el Centro de Satélites de la ONU, al menos 102.067 edificios han sido destruidos, incluyendo escuelas y clínicas.

La crisis alimentaria es alarmante. Al menos el 30% de la población pasa días sin comer, y muchos bebés sufren desnutrición severa. La Ciudad de Gaza ha sido declarada en estado de hambruna por la principal autoridad mundial en crisis alimentarias, aunque Israel disputa esta afirmación.

Con la guerra entrando en su tercer año, Israel ha intensificado su ofensiva en la Ciudad de Gaza, buscando eliminar a los militantes de Hamás y liberar a los rehenes que permanecen en el territorio. Desde el inicio del conflicto, 465 soldados israelíes han muerto en Gaza. En medio de esta crisis, un nuevo plan de paz estadounidense está siendo considerado, mientras las tensiones continúan en la región.