El aumento a la tarifa del transporte público volvió a poner sobre la mesa la desigualdad estructural que atraviesa la movilidad en el Estado de México. Mientras las empresas transportistas presionan por un incremento de hasta 16 pesos y algunas rutas cobran ilegalmente 14, el silencio domina en el Congreso: ningún grupo parlamentario ha fijado postura clara ni exigido sanciones por el cobro irregular.
AD Noticias realizó un ejercicio periodístico con diputadas y diputados mexiquenses para conocer su opinión sobre el “tarifazo” y, sobre todo, cuándo fue la última vez que utilizaron un camión, una combi o el Mexibús. La mayoría admitió no recordar o reconoció no haberlo hecho en décadas. El contraste con los millones de usuarios que viajan hacinados, inseguros y pagando de más, muestra una