María Carcaboso Abrié y Steven Handoko

Yakarta, 10 oct (EFE).- Desde que Indonesia puso en marcha un controvertido programa de comidas gratuitas escolares en enero, miles de niños han sufrido intoxicaciones. Los casos a lo largo del archipiélago siguen creciendo, sin que se hayan averiguado las causas, y con ellos el desconcierto de las familias, que piden mejoras.

Asila Lutfia es una adolescente de 13 años que figura entre los 6.442 estudiantes que enfermaron tras consumir alimentos del programa, según la Agencia Nacional de Nutrición indonesia, responsable de implementar la iniciativa, dotada con 28.000 millones de dólares y cuestionada desde su lanzamiento por estar financiada en detrimento de otros programas públicos.

Su madre, Yeni Arianti, reconoce en una entrevista con EFE que, d

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