Imaginemos la sorpresa de un adolescente alemán cuando descubre en clase de historia que compartía el apellido con una de las figuras más diabólicas del siglo XX. Así fue para Kai Höss , quien en la escuela primaria o secundaria se enteró de que su abuelo era Rudolf Höss, el comandante de Auschwitz, responsable de la muerte de más de un millón de personas , principalmente judíos, en el campo de concentración más letal del Holocausto.
"Mi madre me lo reveló cuando le pregunté por qué teníamos el mismo nombre" , recuerda Höss, ahora pastor de la Iglesia Bíblica de Stuttgart, Alemania. El descubrimiento dejó al joven devastado, pero no fue hasta que leyó la autobiografía de su abuelo a los diecisiete años que realmente comprendió la magnitud del horror. "Fue desgarrador", admite, refi