En las profundidades de Yucatán, donde la selva besa el cielo y los antiguos templos mayas se alzan hacia la eternidad, se cuenta una historia de poder y respeto. Una historia que advierte sobre la importancia de honrar lo sagrado y respetar los secretos de la tierra .

La leyenda comienza con un campesino que, mientras ayudaba a unos arqueólogos en sus excavaciones, encontró una piedra de jade azul brillante en un templo abandonado. A pesar de las advertencias de los expertos sobre no tocar nada, la codicia y la curiosidad pudieron más. Se llevó la piedra a su hogar, ignorando las señales de malestar que comenzaron a sentir él y su familia.

Pronto, extraños sucesos empezaron a ocurrir: enfermedades repentinas, cosechas destruidas y animales muertos. La familia estaba aterrada, sin sa

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