El gobierno de Malí ha anunciado la implementación de nuevos requisitos de visado para ciudadanos estadounidenses, en una respuesta directa y proporcional a las recientes medidas impuestas por la administración de Donald Trump, consideradas por muchos como discriminatorias y de carácter racista.
La semana pasada, Washington introdujo una política migratoria que exige a los solicitantes de visado de Malí —así como de otros seis países africanos— el pago de un depósito de entre 5.000 y 10.000 dólares, reembolsable únicamente si el visitante abandona EE.UU. antes del vencimiento de su visa. Además, restringe su entrada a solo tres aeropuertos del país. Esta medida, que entrará en vigor el 23 de octubre, afecta también a Mauritania, Santo Tomé y Príncipe, Tanzania, Gambia, Malaui y Zambia.
U