Ciudad Juárez.– Con la llegada de las lluvias, muchos conductores descubren que su vehículo presenta filtraciones de agua por el techo corredizo, mejor conocido como quemacocos. En la mayoría de los casos, el problema no está en el sello, sino en los conductos de drenaje que se obstruyen con polvo, hojas o residuos acumulados con el tiempo.
Estos drenajes —generalmente ubicados en las esquinas del marco del quemacocos— tienen la función de canalizar el agua hacia el exterior del vehículo, evitando que se filtre al interior. Sin embargo, cuando se tapan, el líquido busca otras salidas y termina mojando el tapizado o los asientos.
Cómo destaparlos
Expertos en mantenimiento automotriz recomiendan una limpieza preventiva cada seis meses. El procedimiento puede hacerse en casa con herramient