
El nuevo reglamento de extranjería aprobado en mayo por el Gobierno prevé la regularización de casi de un millón de inmigrantes antes de la fecha prevista para la celebración de las generales, en verano de 2027. Parece obvio que el fin último de esta regularización masiva es que buena parte de este millón de personas obtenga la nacionalización española y, en consecuencia, pueda votar. En una respuesta parlamentaria, el Ejecutivo confirma que pretende dar solución a la situación en la que se encuentran 300.000 extranjeros al año desde 2025 y en los dos ejercicios siguientes. El Ejecutivo, sin embargo, no da más detalles sobre las regularizaciones. En todo caso, la norma establece que «se concederá una autorización de residencia temporal por razones de arraigo a las personas extranjeras que se encuentren en España, cuando existan vínculos con el lugar en el que residen, ya sean de tipo económico, social, familiar, laboral o formativo». En una nota de prensa se señala que el tiempo pasará de ser de tres años a solamente dos años.
Desde 2020 se ha producido un crecimiento exponencial de nacionalizaciones por carta de naturaleza , es decir, las que se otorgan a través de reales decretos. En los últimos cinco años han crecido un 336% este tipo de nacionalizaciones, lo que demuestra hasta qué punto el Gobierno de Pedro Sánchez busca nuevos votantes hasta debajo de las piedra. La nacionalidad española por carta de naturaleza es una forma excepcional de adquirir la ciudadanía española, concedida discrecionalmente por el Gobierno, mediante Real Decreto , cuando concurren circunstancias excepcionales. A diferencia de otros procedimientos, no se exige una residencia mínima o requisitos específicos, lo que la convierte en una vía rápida. Y ese es el método que está explotando Pedro Sánchez. Es el más rápido porque acorta los eternos procedimientos administrativos. Y es el más sencillo, porque el Gobierno tiene manos libres para hacer y deshacer a su antojo. En suma, que ante la pérdida -por mucho que el CIS se esfuerce en trasladar lo contrario- de los votos de los de dentro, Sánchez busca seducir a los de fuera otorgándoles la nacionalidad.