Por Itzel Chan

M ÉRIDA, MX.— Diputadas del Congreso del Estado presentaron un punto de acuerdo para exhortar a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) a revisar, suspender o cancelar los registros sanitarios del plaguicida Fipronil, luego de confirmarse que esta sustancia provocó la muerte de millones de abejas en el sur del estado.

La propuesta fue impulsada por la diputada panista Manuela Cocom Bolio, quien relató que el pasado 4 de junio acompañó a apicultores de la comunidad de Nohalal, Tekax, donde constató la mortandad de abejas “al parecer por el uso inadecuado de agroquímicos”.

“Pude constatar la mortandad de las abejas, algunas todavía agonizantes. Hasta ese momento ninguna institución federal, estatal ni municipal había intervenido para investigar el desastre ecológico o brindar apoyo a los apicultores afectados”, señaló la legisladora.

El análisis toxicológico elaborado por el Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) confirmó que la muerte de más de tres millones de abejas se debió a una intoxicación masiva por Fipronil, un insecticida clasificado internacionalmente como Plaguicida Altamente Peligroso (PAP).

Según la Pesticide Action Network International, el Fipronil ocupa el lugar 164 en el listado global de plaguicidas altamente peligrosos debido a su toxicidad para las abejas. Al menos 12 países ya han prohibido o restringido su uso, entre ellos la Unión Europea, Argentina, Colombia, China y Vietnam.

“El Fipronil es un veneno silencioso que ha devastado colmenas enteras en nuestro estado. Este plaguicida no distingue entre plaga y vida. Contamina suelos, agua, afecta polinizadores y permanece activo hasta por un año después de una sola aplicación”, enfatizó Cocom Bolio.

La diputada Melba Gamboa Ávila respaldó la propuesta y subrayó que la discusión “no es un trámite más, sino una cuestión de vida o muerte para uno de los pilares más importantes de Yucatán: la apicultura, nuestros ecosistemas y nuestras comunidades rurales”.

El punto de acuerdo exhorta a la Cofepris a actuar en el ámbito de sus atribuciones para revisar y suspender el uso de Fipronil, y solicita a la Secretaría de Agricultura (Sader) emitir medidas emergentes que restrinjan su aplicación en Yucatán. También llama a la Semarnat y la Profepa a reforzar la inspección y sanción por uso indebido de plaguicidas, así como al Gobierno del Estado y a los ayuntamientos a promover políticas y reglamentos que favorezcan alternativas agroecológicas.

El caso de Nohalal, ocurrido el pasado 10 de mayo, fue considerado un ecocidio por organizaciones ambientales y comunidades locales, al arrasar con más de 300 colmenas y diez apiarios, generando pérdidas superiores a los 465 mil pesos.

“Proteger a las abejas es proteger la biodiversidad, la economía rural y el futuro de Yucatán. Cuando una abeja muere, no muere sola; con ella se apaga un pedacito de nuestro futuro”, expresó Gamboa Ávila al cierre de su intervención. ( Noticaribe )