Un estudio que abarcó 744 puentes en todo el mundo descubrió que las estructuras en América del Norte se encuentran en peor estado, seguidas de las de África. Además del análisis y la clasificación, los científicos aportan una solución que podría cambiar la forma en que se protege la infraestructura a nivel mundial: monitorizar la estabilidad de los puentes desde el espacio para detectar problemas antes de que se conviertan en desastres.
Una investigación liderada por la Universidad de Houston, en Estados Unidos, que contó con la colaboración de ingenieros y científicos de universidades europeas y estadounidenses, integró datos tradicionales con mediciones obtenidas a través de una técnica denominada MT-InSAR, que permite detectar desplazamientos milimétricos en estructuras desde satélit