Vuelven a producirse abusos y atropellos de algunos poderes en medio de un silencio cómplice. Y hay que denunciarlo
Una de las frases que, después del franquismo, quedaron en la conciencia de los españoles, es que lleves cuidado con lo que dices o haces, porque un día podrían ir a por ti. La frase se escucha todavía recurrentemente, cincuenta años después, y responde a un modo netamente mafioso de entender el ejercicio del poder imponiendo una especie de omertà , es decir, de silencio forzosamente cómplice, ante los abusos y atropellos. No es algo, ni mucho menos, que haya pasado solamente en España — acuérdense del pobre Émile Zola en Francia —, pero sí que es un comentario que se escucha con frecuencia en España, y no realmente en el resto de países europeos.
Podría decirse que sem