Cristian Graf —el hombre que vivió durante décadas en la casa lindera a la que alquiló Gustavo Cerati en el barrio de Coghlan—se presentó a declarar en la causa que investiga el encubrimiento del asesinato de su excompañero de secundaria, Diego Fernández Lima. Su defensa pidió el sobreseimiento y el archivo de la causa.
La indagatoria fue ordenada por el juez Alberto Litvack a pedido del fiscal Martín López Perrando, titular de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°61.
“Fueron tres horas de declaración. Vamos a esperar qué decisión va a tomar el fiscal como así también qué decisión va a tomar el juez”, dijo Érica Niczypor, abogada de Graf, minutos después de la audiencia.
“La declaración fue extensa. Él declaró. La fiscalía le hizo preguntas, contestó. Fue muy preciso”,