CNN Español —
“Maldito el soldado que apunte su arma contra su pueblo” es una frase a menudo atribuida al Libertador Simón Bolívar y un estribillo constante en las sucesivas olas de protestas opositoras en contra del Gobierno chavista en Venezuela.
Desde al menos octubre de 2014, después del primer movimiento masivo que desafió al presidente Nicolás Maduro, en muchos hogares opositores ese soldado ha tenido una cara y un cargo definidos: el general en jefe de la Fuerza Armada, Vladimir Padrino López.
Se trata de uno de los hombres de más confianza del presidente de Venezuela y, como ministro de Defensa desde hace más de una década, es la representación física de la “unión cívico militar” tan alabada por la retórica gubernamental. El ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Pa