Después de casi diez años como uno de los sistemas operativos más populares del mundo, Microsoft dio por finalizado el soporte oficial de Windows 10 el 14 de octubre de 2025.
La principal consecuencia de esta medida es que el software ya no tiene más actualizaciones de seguridad, parches ni correcciones de vulnerabilidades.
Justamente por ese motivo es que seguir usándolo puede convertirse en un riesgo para tus datos e inclusive para tus ahorros.
Cuando un sistema operativo deja de tener soporte, deja también de recibir protección frente a amenazas y hackeos. Así, cualquier falla o debilidad descubierta a partir de ahora quedará abierta para siempre.
Sin actualizaciones, cada nueva brecha detectada es una oportunidad para ciberdelincuentes, que pueden aprovechar los huecos de e