Redacción T21 Madrid 18 OCT 2025 9:18 Actualizada 18 OCT 2025 9:19
Cuando un robotaxi de Waymo desafió un semáforo en Los Angeles y ejecutó un giro ilegal, los agentes descubrieron una paradoja: sin conductor humano que detener, no había a quién imponer la multa. Un reto que enfrentan también California, Berlín, Pekín y otras capitales: ¿cómo castigar a un algoritmo que infringe las normas de tráfico?
Una noche de septiembre en San Bruno, California, dos agentes que patrullaban en busca de conductores ebrios observaron un robotaxi de Waymo realizar un giro prohibido frente a ellos. Al no hallar a ningún ser humano al volante, los policías se vieron imposibilitados de imponer una multa y, en su lugar, se limitaron a notificar el "fallo técnico" a la compañía. Este episodio, más all