«La fe en servicio para los demás. El amor de Dios convertido en acción para los humildes». Así describió el presidente Nicolás Maduro el legado de los santos venezolanos José Gregorio Hernández y la madre Carmen Rendiles, quienes este domingo 19 de octubre fueron elevados a los altares.
Tras participar en una vigilia realizada en la Casa Museo José Gregorio Hernández, en La Pastora, Caracas, el jefe de Estado señaló que «el que sea cristiano de corazón, cristiano de Cristo, tiene que buscar la esencia para llevarla a la práctica, a la acción, a la vida, eso fue lo que hizo José Gregorio y la madre Carmen», expresó.
El mandatario pidió al pueblo llenarse de amor y de orgullo para reafirmar la venezolanidad frente a los ataques xenofóbicos que aún sufren algunos venezolanos en el exterior