“Estoy consciente que solo soy un instrumento de San José Gregorio Hernández. Lo más importante es tener fe en Dios y en nuestro venerable santo venezolano”

Norma Pérez

Bayron Paz es tachirense, tiene 49 años de edad y un don de sanación, que atribuye a San José Gregorio Hernández. Vive a 2 mil 400 metros sobre el nivel del mar, en el páramo de Boca de Monte. Hasta allí, llega gente de diferentes estados del país, en busca de alivio para sus males, impulsados por una infinita e inquebrantable fe.

A un lado de la carretera, se encuentra su vivienda, conocida como La Casa del Escultor. La distingue una figura de grandes dimensiones de Marcos Pérez Jiménez, y otra, un poco más pequeña, del Siervo de Dios, en la que con dificultad y recursos escasos, pero mucho empeño, ha trabajado durante

See Full Page