Luego de su canonización, san José Gregorio Hernández fue coronado en un emotivo momento que se vivió en la plaza de La Candelaria, en Caracas, en la madrugada de este 19 de octubre, reseñó El Nacional.

La aureola que ahora tiene el médico de los pobres la llevó desde la iglesia Nuestra Señora de la Candelaria hasta la plaza, una niña que vestía como un ángel.

Así se concretó de forma simbólica el ascenso a los altares del doctor trujillano, conocido por interceder en la sanación de enfermos.

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