Ni las cuotas sin interés, ni los descuentos, ni las promociones bancarias lograron revertir la tendencia. Por cuarto año consecutivo, las ventas minoristas de las pymes en el Día de la Madre volvieron a caer. Según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), los comercios facturaron un 3,5% menos que en 2024 en una de las fechas más fuertes del año, solo superada por la Navidad.
El dato es un nuevo golpe para un sector que esperaba, al menos, un respiro. La celebración ya no genera el repunte que solía tener y el consumo sigue atado a la realidad de los bolsillos. El ticket promedio fue de $37.124, un 9,8% más que el año pasado. Sin embargo, la inflación hizo su parte: en términos reales, eso representa una caída del 16,7%.
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