Un sargento de la Policía local de Ituzaingó disparó y mató a un adolescente de 16 años durante un intento de asalto en El Palomar, partido de Morón. El incidente ocurrió la noche del sábado, cuando el agente, que trabajaba como chofer de una aplicación de viajes, fue abordado por tres jóvenes armados que simularon ser pasajeros. La víctima, identificada como Ariel Muñoz, subió al vehículo desde el asiento del acompañante, mientras que sus cómplices se acomodaron en la parte trasera. Una vez dentro, Muñoz amenazó al conductor con un arma, obligándolo a descender del vehículo y despojándolo de su teléfono celular y la llave de encendido. Los asaltantes forzaron al chofer a tirarse al suelo en la intersección de Cacique Namuncurá y Pampa, donde intentaron robar la camioneta. En ese momento, el sargento se identificó como policía y disparó su arma reglamentaria, impactando a Muñoz. El disparo resultó fatal para el adolescente, quien intentó huir junto a sus cómplices. Los acompañantes de Muñoz lo sacaron del lugar y lo llevaron al hospital Posadas en un vehículo particular, presuntamente conducido por la tía de uno de ellos. A pesar de los esfuerzos médicos, el adolescente fue declarado muerto poco después de su ingreso. Mientras tanto, los dos cómplices fueron detenidos por agentes de la Policía Bonaerense que custodiaban el centro de salud. El fiscal Pablo Cabrejas, a cargo de la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil N° 2 de Morón, solicitó la detención de los adolescentes para esclarecer su participación en el asalto. Hasta el momento, el fiscal no ha tomado medidas contra el sargento, considerando que actuó en legítima defensa. El agente resultó ileso en el ataque. Este incidente se produjo apenas 24 horas después de que un comisario retirado de la Policía Federal Argentina matara a dos adolescentes en un intento de robo en la misma localidad. En ese caso, el ex jefe policial se enfrentó a los asaltantes cuando llegaba a su casa, resultando en un tiroteo que dejó a uno de los adolescentes muerto en el lugar y al otro fallecido más tarde en el hospital. Las autoridades continúan investigando ambos casos, que han generado preocupación en la comunidad sobre la seguridad y la violencia en la zona.