Durante varios días, circuló en redes sociales un supuesto fallo que presentaba al alcalde de Popayán como sancionado con arresto y multa por desacatar una orden judicial. Sin embargo, la historia cambió drásticamente: el Tribunal Superior del Distrito Judicial de Popayán dejó sin efecto la sanción al comprobar que la Alcaldía sí respondió en el tiempo y forma exigidos . El “pecado” fue un simple error humano… pero el linchamiento mediático, ese sí, fue intencional.
La historia mal contada
Todo comenzó con un fallo del Juzgado Primero Civil del Circuito Especializado en Restitución de Tierras que, por “no encontrar respuesta”, sancionó al alcalde Juan Carlos Muñoz Bravo con tres días de arresto y una multa de cinco salarios mínimos. Lo que el juzgado no notó, porque nadie es perfecto,