El premier Ernesto Álvarez ha confirmado que el gobierno actual ha decidido no continuar con la reapertura del penal de El Frontón, un proyecto que había sido promovido por la administración de Dina Boluarte. En una entrevista reciente con canal N, Álvarez subrayó que esta decisión se basa en consideraciones económicas, afirmando que "es demasiado caro". El presidente del Consejo de Ministros explicó que, en lugar de reabrir El Frontón, se podría utilizar el presupuesto para construir dos nuevos penales. "Ya tenemos el terreno del penal de Ica, que hay que impulsar, destrabar ese proyecto y concretarlo", añadió. Además, el premier descartó la posibilidad de implementar la pena de muerte en el país. Según sus palabras, esta medida no disuade a los criminales violentos, sino que podría convertir a los condenados en figuras heroicas en ciertas comunidades. "El problema de la pena de muerte es que no disuade al violento, al reincidente, al que ya ha sido capturado mentalmente por la violencia", afirmó. Álvarez también propuso que el sistema judicial debería enfocarse en penas efectivas y procesos penales más ágiles, donde los fiscales y jueces sean promovidos por su desempeño en la resolución de casos, no por su relación con los medios o la política. Por último, el premier aseguró que la posibilidad de que Perú se retire de la competencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos no ha sido discutida en el Gabinete ministerial. La situación sigue en desarrollo, y se espera más información sobre las políticas del gobierno en relación con el sistema penitenciario y los derechos humanos.