Han pasado nueve años desde que Carlos L. , un estibador del puerto de Barcelona , fue detenido por la supuesta posesión de c asi un kilo de cocaína, varias piezas de hachís, un hacha y una pistola semiautomática.

El caso, aparentemente cerrado, dio un giro inesperado tres años después , cuando se destapó que el trabajador había sido víctima de un montaje de película para incriminarlo falsamente.

Él quedó absuelto y, en paralelo, se abrió un nuevo procedimiento para investigar a las cuatro personas que supuestamente urdieron el plan. Entre ellas, dos agentes de los Mossos d’Esquadra .

Este lunes, 27 de octubre , los cuatro acusados se sentarán en el banquillo de la Audiencia de Barcelona para responder por su presunta implicación en esta trama.

Entre 6 y 17 años de pr

See Full Page