Daniel Waterman falleció el pasado 8 de octubre debido a las graves lesiones sufridas en un accidente automovilístico ocurrido en febrero, pero no sin antes recuperar la conciencia y revelar a la policía que el choque fue provocado de forma deliberada por su novia.

Waterman viajaba como pasajero en el vehículo conducido por Leigha Mumby, de 24 años, durante el fin de semana del Super Bowl. Según testigos y declaraciones policiales, antes del accidente, Mumby le habría dicho: No me importa lo que pase. Vas a recibir lo que te mereces .

Tras semanas en coma, Waterman despertó lo suficiente como para hablar con los investigadores desde su cama de hospital. Su madre y su abuelo confirmaron que sufrió múltiples fracturas: cuello, espalda, clavícula, ambas caderas, una pierna y un tobillo.

Foto policial de Leeigha Mumby

Leigha Mumby, de 24 años, vio elevados los cargos a homicidio vehicular tras la muerte de Waterman.  (Oficina del Sheriff del Condado de Flagler)

Mumby fue detenida inicialmente en julio y enfrentó cargos por conducción temeraria con lesiones. Después de la muerte de Waterman, la fiscalía elevó los cargos a homicidio vehicular . Fue puesta en libertad tras pagar una fianza de 150.000 dólares. 

El abogado de la familia, John Hager, declaró: Esto no fue un accidente. Las pruebas muestran que no usó los frenos y el coche aceleraba al momento del impacto .

Leigha Mumby estaba embarazada del hijo de Waterman al momento del accidente. La familia confirmó que dio a luz tras el hecho.

En una campaña de GoFundMe, sus seres queridos señalaron: Daniel estaba entusiasmado por ser padre de una niña. Su mayor deseo era volver a casa con ella y su familia. No había día en que no lo dijera