San Francisco.- Niños del barrio Tenderloin de San Francisco comieron pizza, saltaron en un castillo hinchable, se pintaron la cara y recogieron bolsas de caramelos el miércoles durante el primer festival de calabazas del vecindario.

El barrio de Tenderloin, cerca del Ayuntamiento, es uno de los más conflictivos de San Francisco , azotado por el consumo de drogas a la vista de todos y la indigencia. Pero también tiene la mayor concentración de niños de la ciudad, aproximadamente 3 mil, procedentes en su mayoría de familias inmigrantes.

La idea del evento surgió de padres atendidos por la organización sin fines de lucro Compass Family Services. Sugirieron una excursión a un campo de calabazas para Halloween, dijo Erica Kisch, directora ejecutiva del grupo.

Kisch se apresuró a organizar u

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