Este método ancestral se basa en colocar un vaso con agua y sal en un punto específico de la casa. La sal actúa como purificadora natural, capaz de absorber las energías negativas, mientras que el agua representa el movimiento y la abundancia. Juntas, crean una especie de “remedio energético” que limpia el ambiente y favorece la llegada de la prosperidad.
LEER MÁS► Halloween en Santa Fe: la historia real del chofer que vio a un fantasma en el cementerio municipal
Dónde colocar el vaso con agua y sal
Los expertos en Feng Shui recomiendan ubicar el vaso en la esquina de la riqueza del hogar, que suele encontrarse en el sector suroeste o al fondo a la izquierda al ingresar por la puerta principal. También puede colocarse sobre una repisa o estante alto, siempre en un lugar visible y ven

AIRE DIGITAL

AlterNet
Raw Story
ABC 7 Chicago Health
MLB
The List
Space.com
TechCrunch