Han destapado el tarro del horror y la inhumanidad sin paliativos. En Italia organizaban cacerías de personas a cien mil euros la pieza para irse de ‘safari humano’ allí donde matar pasaba desapercibido. La degradación humana sin límites. Inocuo y sin testigos.
Viajecito a la zona de guerra; francotirador que te deja su arma con mirilla; selección de la pieza según lo abonado (hombre más barato; mujer más precio; embarazada lo más caro); apretar el gatillo y ver a la pieza desplomarse abatida. Parece que la sensación de omnipotencia sobre la vida les enganchaba. Dicen que el dinero en exceso droga el cerebro y permite mirar desde arriba a los humanitos que como hormigas se retuercen de dolor bajo la suela del zapato.
Recuerdo imágenes en la tele de transeúntes acelerando el paso por las

Granada Hoy

Salon
The radio station 99.5 The Apple
AlterNet
RealClear Politics
CNN
Women's Wear Daily Lifestyle
US Magazine
New York Post
The Babylon Bee
NHL Florida Panthers