E l duelo ante los Raiders no fue un partido más, fue el primero sin Marshawn Kneeland , y el equipo lo sintió desde el calentamiento hasta el último minuto del encuentro. Los jugadores saltaron al emparrillado con camisetas estampadas con su rostro y portando el número 94 en cascos y equipamiento a modo de homenaje póstumo.

Pero fue Ryan Flournoy quien protagonizó uno de los momentos más conmovedores pues, al finalizar el juego, levantó una jersey de Kneeland frente a la afición, un gesto que simbolizó el cariño y el vacío que dejó su compañero. Mismo jersey colgaba en un casillero especial acondicionado en el vestidor visitante, reservado únicamente para honrar su memoria.

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Las Vegas Raiders se une al homenaje Marshawn Kneeland

Incluso los R

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