En noviembre de 1975, en Santiago de Chile, oficiales de inteligencia de Argentina, Bolivia, Paraguay, Uruguay y Chile crearon el "Sistema Cóndor", una red de cooperación represiva entre dictaduras del Cono Sur con apoyo del Gobierno de Estados Unidos. El procedimiento permitió operar contra los exiliados que denunciaban a los regímenes de derecha en sus países desde el extranjero. También fueron perseguidos sus familiares, entre ellos una familia uruguaya detenida por los militares en Brasil.