Subir a un escenario The Fairy Queen de Henry Purcell es poco más que una utopía. Si se respetan los usos interpretativos de la época, falta mucha palabra y sobra solemnidad interpretativa, porque hablamos de una obra que no es una ópera y donde la música de Purcell tenía una presencia mucho menos mitificada que la que se le da hoy día. Y si se representa solo lo estrictamente musical, la ausencia de tejido dramático es difícilmente asumible. Esta disyuntiva forma parte de la gran dificultad que a día de hoy mantiene el mundo lírico purcellinao: enfrentarse a un genio con una única ópera conservada —ni completa ni manuscrita— y cuatro semi-óperas que han de reelaborarse radicalmente para subir a las tablas, como ya pasó hace una década con The Indian Queen de Purcell/Currentzis/Sellars.
A

LA RAZÓN Cultura

Just Jared
CNN
KCCI 8 Entertainment
New York Daily News Snyde
Page Six
5 On Your Side Sports
The List
The Conversation
MSNBC