No aparece en ningún mapa turístico, pero basta conducir de noche hacia esta pequeña aldea ourensana para entender por qué, desde hace cinco años, diciembre se ha convertido aquí en un escaparate de energía colectiva .

A las siete en punto de esta tarde, A Mioteira volvió a encender su Navidad . No hubo gran acto inaugural. Ni falta que hace. Bastó con que cada vecino activara el interruptor para que las cinco calles quedaran convertidas, una vez más, en un pequeño circuito festivo visitado ya por curiosos de toda la provincia.

Todo comenzó en 2020, cuando el encierro convirtió a la mayoría en espectadores de sus propios muros . Aquí, sin embargo, decidieron desafiarlos. " Empezamos para mantenernos unidos ", recuerda Katy. A su lado, Ana asiente: "Tenemos tantas cosas acumuladas

See Full Page