El PSOE dice ahora que investigará las denuncias por acoso que ha recibido contra Paco Salazar de dos militantes socialistas, a pesar de que se haya dado de baja de militancia y de que han desaparecido del sistema, tal y como ha revelado elDiario.es . La portavoz socialista, Montse Mínguez, ha asegurado que “la pérdida de condición de afiliado de Salazar no supone el fin del procedimiento”. “El proceso no se ha cerrado, no ha concluido, por mucho que Salazar haya perdido su condición de afiliado”, ha asegurado Mínguez.

Dos militantes denunciaron hace cuatro meses y medio en el canal interno que el entonces asesor de Pedro Sánchez en el gabinete de Moncloa “sobrepasaba las líneas” con “comportamientos misóginos”, pero no han recibido ninguna respuesta, a pesar de que el protocolo que el PSOE puso en marcha para las denuncias de este tipo establece un plazo de instrucción de tres meses, que se puede prorrogar otros seis en situaciones “excepcionales”.

Pero las denunciantes no solo no han recibido respuesta sino que sus expedientes han desaparecido del sistema. A preguntas de elDiario.es, la dirección socialista atribuyó a “falta de diligencia” esa situación, pero aseguraron que la falta de afiliación de Salazar hacía inútil seguir adelante con la investigación. Esa respuesta inicial se ha cambiado tras la publicación de elDiario.es .

La portavoz ha atribuido el retraso en la instrucción a la complejidad de la tramitación de denuncias que son anónimas. “Estamos hablando de denuncias anónimas, tienen su especial dificultad”, ha dicho Mínguez en la rueda de prensa tras la reunión de la ejecutiva a preguntas de este medio sobre la asunción de responsabilidades por no haber instruido a tiempo el caso.

La portavoz del PSOE, Montse Mínguez, en la rueda de prensa de este lunes en Ferraz.

“El PSOE está comprometido con todas y cada una de las mujeres, y con todas las mujeres que son militantes”, ha dicho la portavoz, que ha insistido en que “este proceso no ha concluido” y ha explicado que el organismo antiacosolo redactará un informe que se elevará a la Secretaría de Organización y se trasladará también a las partes.

Mínguez ha mandado un “mensaje de tranquilidad” a las “compañeras que quieran hacer uso de este protocolo”. “Estamos trabajando y el proceso continúa. El proceso va a continuar gasta llegar a su fin”, ha afirmado la portavoz, que ha presumido de que “el PSOE es el primer partido que ha implantado un protocolo sobre acoso”, que “se aprobó en mayo y se empezó a implementar en julio”. “Somos pioneros”, ha rematado.

Fuentes socialistas dicen que “no se ha borrado nada”, a pesar de que en el sistema no figura nada respecto al procedimiento, y que se debe a un fallo informático que está en proceso de solución. “Lo que hace es una especie de ocultación de los datos, pero no es una interrupción. Las denuncias llegan a la oficina antiacoso. Aunque no se vean ahí, no quiere decir que no la tengan en esa oficina”, apuntan esas fuentes, que aseguran que las denuncias “volverán a aparecer” en el sistema para que el proceso culmine.

Varias mujeres denunciaron “comportamientos inadecuados” de Salazar cuando era su jefe . La revelación de elDiario.es el pasado mes de julio provocó una rebelión de destacadas mujeres del PSOE en contra de la decisión de Sánchez de mantenerle en la dirección del partido. Finalmente, Salazar abandonó sus cargos en el PSOE y en el Gobierno , donde ocupaba el puesto secretario general de Coordinación Institucional en Moncloa.

A pesar de las denuncias interpuestas días después y que no se han resuelto, Salazar mantiene contacto habitual con sus compañeros de partido. La ministra portavoz y líder del PSOE en Aragón, Pilar Alegría, comió con él en un restaurante de Madrid hace unas semanas y enmarcó el encuentro en su relación personal.

La versión oficial del partido y del Gobierno es que Salazar no ha vuelto a trabajar para ellos. Sin embargo, otras fuentes socialistas sostienen que lo hace de forma externa tanto para La Moncloa como para la calle Ferraz. Salazar es una de las personas que asesoran al president de la Generalitat, Salvador Illa, en su calidad de primer secretario del PSC y ha hecho trabajos para los socialistas catalanes después de que cesara de sus funciones en Moncloa.