El Ministerio del Medio Ambiente ha señalado que la gestión de olores no se limita a la incomodidad que pueden causar, sino que es parte integral de la calidad ambiental. Los olores influyen en la convivencia, el desarrollo territorial y la percepción de riesgo de las personas. Con esta nueva conmemoración, Chile reconoce que los olores deben ser abordados de manera sistemática, incluyendo regulación, fiscalización y participación ciudadana.

La definición del Día del Olor surge de la necesidad de incorporar este aspecto como un eje de política ambiental, al igual que el aire, el agua o el ruido. Los episodios odoríferos pueden afectar la salud mental y emocional de las personas, generar conflictos entre comunidades y empresas, y demandar respuestas coordinadas del Estado. Para avanzar en esta materia, el Ministerio destacó la importancia de mejorar estándares, aplicar nuevas metodologías de medición e impulsar una regulación moderna basada en evidencia científica y criterios internacionales.

Para marcar esta primera conmemoración, el Ministerio del Medio Ambiente organizó el Primer Seminario Interinstitucional sobre Olores, que reunió a servicios públicos, academia, municipios y organizaciones sociales. Durante el evento, la ministra Maisa Rojas enfatizó la necesidad de una coordinación efectiva entre instituciones como el Ministerio de Salud, la Superintendencia del Medio Ambiente y el Servicio de Evaluación Ambiental.

El Día del Olor busca establecer un hito anual que promueva buenas prácticas, eduque a la ciudadanía y fortalezca las capacidades públicas para enfrentar esta problemática. El Ministerio ha afirmado que continuará trabajando para consolidar una regulación de olores robusta, participativa y orientada a mejorar la calidad de vida de las personas.