A partir del 1 de enero de 2026 , millones de trabajadores en España notarán un pequeño ajuste en su nómina debido al Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) , aprobado mediante el Real Decreto-ley 2/2023 y publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) . Este mecanismo forma parte de la segunda reforma de las pensiones y tiene como objetivo reforzar el Fondo de Reserva de la Seguridad Social , conocido popularmente como la «hucha de las pensiones», con el fin de garantizar la sostenibilidad del sistema ante el incremento previsto de jubilaciones en las próximas décadas.

El MEI consiste en una cotización adicional , obligatoria para todos los trabajadores que coticen por jubilación, independientemente de su nivel de ingresos. No se trata de un pago único, sino de una aportación mensual que se aplica directamente en la nómina. La Tesorería General de la Seguridad Social se encarga de calcular y descontar automáticamente la cantidad correspondiente, mientras que la empresa transfiere esta aportación al Fondo de Reserva.

Mecanismo de Equidad Intergenereacional (MEI)

El cálculo del MEI se basa en un porcentaje sobre la base de cotización de cada trabajador. Por lo tanto, cuanto más alto sea el salario, mayor será la aportación, aunque existe un límite establecido por la base máxima de cotización. Para 2026, la base máxima estimada es de 63.180 euros anuales .

El próximo año, tipo de cotización total del MEI se incrementará hasta un 0,90% , de los cuales el 0,75% lo asumirá la empresa y el 0,15% restante el trabajador. Esto significa que quienes perciban salarios muy elevados podrán llegar a pagar el máximo, que se aproxima a 95 euros anuales.

Para entender cómo afecta el MEI a la nómina de los trabajadores , se puede ver un ejemplo de aportaciones mensuales según el salario bruto:

  • Un trabajador con un salario bruto de 1.200 euros pagaría un total de 10,80 euros al mes, de los cuales 9 euros corresponden a la aportación de la empresa y 1,80 euros al trabajador.
  • Si el salario sube a 1.300 euros, la aportación total sería proporcionalmente mayor, alrededor de 11,70 euros, repartidos entre 9,75 euros de la empresa y 1,95 euros del trabajador.
  • Con un salario de 1.400 euros, la deducción total ascendería a 12,60 euros, con 10,50 euros a cargo de la empresa y 2,10 euros del empleado.
  • Para 1.500 euros brutos, la aportación total sería de unos 13,50 euros, divididos en 11,25 euros de la empresa y 2,25 euros del trabajador.
  • Subiendo a 1.600 euros, la deducción mensual llegaría a 14,40 euros, de los cuales 12 euros corresponden a la empresa y 2,40 euros al empleado.
  • Con un salario de 1.700 euros, la aportación total sería aproximadamente de 15,30 euros, repartida entre 12,75 euros de la empresa y 2,55 euros del trabajador.
  • A 1.800 euros brutos, la deducción ascendería a 16,20 euros, 13,50 euros de la empresa y 2,70 euros del trabajador.
  • Para 1.900 euros, la aportación sería de unos 17,10 euros, con 14,25 euros a cargo de la empresa y 2,85 euros del trabajador.
  • Finalmente, un salario de 2.000 euros implicaría un descuento de 18 euros al mes; 15 euros de la empresa y 3 euros del trabajador.

Evolución

Para entender la progresión del MEI, conviene revisar cómo ha evolucionado desde su implementación. En 2023 , la cotización total fue del 0,60%, de los cuales 0,50% correspondía a la empresa y 0,10% al trabajador. En 2024 subió al 0,70% (0,58% empresa y 0,12% trabajador), y en 2025 al 0,80% (0,67% empresa y 0,13% trabajador). Para 2026, el total será del 0,90%, con un 0,15% a cargo del trabajador.

En 2027, la cotización total alcanzará el 1%, de la cual la empresa asumirá el 0,83% y el trabajador el 0,17%, manteniendo así la proporcionalidad entre ambas partes. En 2028, la aportación total subirá al 1,10%, correspondiendo el 0,92% a la empresa y el 0,18% al trabajador, y se seguirá aplicando sobre la base de cotización de cada empleado, con un tope máximo para quienes perciban salarios elevados. Finalmente, en 2029 , la cotización llegará al 1,20%, distribuyéndose con un 1% a cargo de la empresa y un 0,20% a cargo del trabajador.

Es importante destacar que la cotización del MEI no incrementa la cuantía de la futura pensión de los trabajadores. Su único objetivo es reforzar el Fondo de Reserva.

Exenciones

La norma establece que todas las personas trabajadoras están obligadas a contribuir al Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) mediante una deducción en su nómina, aunque existen algunas excepciones específicas.

El Artículo 152 «Cotización al Régimen General a partir de la edad de jubilación» establece que «las empresas y las personas trabajadoras quedarán exentas de cotizar a la Seguridad Social por contingencias comunes, salvo por incapacidad temporal derivada de dichas contingencias, respecto de los trabajadores por cuenta ajena una vez hayan alcanzado la edad de acceso a la pensión de jubilación que en cada caso resulte de aplicación según lo establecido en el artículo 205.1.a). La exención en la cotización comprenderá también las aportaciones por desempleo, Fondo de Garantía Salarial y formación profesional. Las exenciones establecidas no serán aplicables a los trabajadores que presten sus servicios en las Administraciones Públicas. Los períodos en los que resulte de aplicación la exención serán computados como cotizados a efectos de acceso y determinación de la cuantía de las prestaciones».