Hoy, una institución que omite a su capital humano en sus estatutos de gobernanza no solo resulta éticamente cuestionable, sino estratégicamente ciega.

Omar Flores Fonseca

Hola estimados lectores, quiero seguir en la misma tonica de mis columnas más recientes, quiero hablar de un tema fundamental en las organizaciones y que algunas veces se descuida en algunas áreas o departamentos, heblemos del patrimonio humano con el que cuentan las instituciones y como deben de procurarlo desde la alta esfera de las mismas. Publicidad

Durante décadas, cuando hablábamos de Gobierno Corporativo, la conversación orbitaba alrededor de dos temas: la protección de los accionistas y el cumplimiento normativo. Imaginábamos salas de juntas frías, repletas de gráficos financieros y estrategias para maximizar

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