Una investigación policial de los Mossos, que empezó en enero por la información que Catalunya recibía grandes cantidades de fármacos de países bálticos, ha permitido desarticular una red criminal dedicada a la distribución nacional e internacional de medicamentos ilegales, dopantes y falsificados .

La cara visible de la trama era un conocido médico endocrino y divulgador en redes sociales que utilizaba su consulta en Barcelona, tanto presencial como virtual, para captar clientes. El médico detenido conoce que distribuir fármacos a una persona con buena salud, es un delito porque existe un empeoramiento de la salud del receptor.

La operación se ha saldado con nueve detenidos y la intervención de más de 1,5 millones de euros .

Un negocio millonario con la salud en riesgo par

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